miércoles, 19 de septiembre de 2012

Desde las alturas


Desde las alturas todo se ve diferente. Difícilmente podrás ver el suelo, ya que las nubes lo tapan por completo. Algo parecido ocurre si en muchos de esos enormes rascacielos que podemos encontrar en Nueva York, por ejemplo. Eso no quiere decir que el suelo no esté ahí. Existe, pero no podemos verlo, y eso asusta. Miedo a lo desconocido, miedo a las alturas. Miedo.

El miedo es como volar a grandes alturas. Tan alto que todo se vuelve diminuto, tanto que en ocasiones desaparece. Los miedos nos suben a uno de esos rascacielos donde no podemos ver nada más que nubes, y de pronto apareces tambaleándote sobre una cornisa.

Entonces bajas a la calle y todo parece más seguro, estás con los pies en el suelo y ya no puedes caer al vacío.

Levantas la cabeza y apenas ves la última planta. Del mismo modo no ves los aviones que sobrevuelan tu cabeza.

No ves los miedos que sobrevuelan tu cabeza.